¿Qué son las redirecciones y por qué son importantes? Estas son procesos mediante los cuales se envía al usuario de un sitio web desde una URL a otra. Estas pueden ser permanentes o temporales, y su uso es importante para mantener la funcionalidad del sitio. Así se evitan errores y se mejora la experiencia del usuario.
Como herramienta pueden ayudar a solucionar problemas de contenido duplicado. También, actualizar URL obsoletas y mejorar el SEO de un sitio web al dirigir a los usuarios a la versión correcta de una página. Además, son útiles para manejar cambios de dominio y mover contenido de un sitio a otro sin perder el tráfico.
¿Cómo afectan los cambios de dirección al SEO? Si no se usan correctamente, los usuarios pueden encontrar un error 404 . Igualmente, los motores de búsqueda pueden indexar contenido duplicado, lo que puede afectar negativamente al SEO.
Este proceso también es fundamental para la experiencia del usuario. Es a través de este que los visitantes llegan al contenido que están buscando sin encontrar errores o frustraciones.
En cuanto al SEO, las redirecciones pueden afectar positiva o negativamente al posicionamiento en los resultados de búsqueda. Por ejemplo, si se desvía correctamente una URL eliminada a una nueva página relevante, se puede transferir la autoridad de enlaces y mantener la clasificación de búsqueda original.
Adicionalmente, si se remite a una página no relevante o se hace varias veces, puede afectar negativamente al posicionamiento en los resultados de búsqueda. Por ello, es importante utilizarlas de manera cuidadosa y estratégica para evitar impactos negativos en el SEO.
¿Cuáles tipos de redirecciones existen? Según lo revisado por Splitt y Mueller, existen diferentes tipos de redirección, cada una con su propósito y situación de uso específico. En este sentido, es fundamental conocer las diferencias entre estas y saber cuándo y cómo emplear cada una.
Redirección 301 En esta se indica a navegadores y motores de búsqueda que una página ha sido movida a una nueva URL. Esto significa que cualquier tráfico o enlaces dirigidos a la URL antigua serán automáticamente redirigidos a otra dirección.
Deberías emplear una redirección 301 cuando muevas una página o si deseas cambiar la estructura de tus URL. También, si deseas fusionar varias páginas en una sola.
Ahora, para implementar una redirección 301 correctamente, necesitas agregar una línea de código en tu archivo .htaccess. Asimismo, podrás utilizar un plugin para redirigir las URL en tu plataforma CMS. Asegúrate de que la redirección esté correctamente implementada antes de eliminar la página antigua.
Redirección 302 Contrario a la 301, esta indica que una página ha sido temporalmente movida a una nueva URL. Esto significa que cualquier tráfico o enlaces dirigidos a la URL antigua, serán redirigidos a la nueva URL, pero solo temporalmente.
Deberías utilizar una redirección 302 cuando muevas una página temporalmente a una nueva ubicación. Por ejemplo, en el caso de estar realizando el mantenimiento de tu sitio web o una prueba A/B.
¿Qué opción es mejor desde el punto de vista de Google? El equipo concluye que la mayoría de los casos es preferible usar redirecciones 301 en lugar de 302. Si un recurso se ha movido de forma permanente, los motores de búsqueda como Google actualizarán sus índices. Una vez realizado este proceso se reflejará la nueva ubicación y transferirán la mayor parte del valor SEO de la página original a la nueva página.
En cambio, si un recurso se ha movido temporalmente, los motores de búsqueda no transferirán tanto valor SEO. En consecuencia, seguirán indexando la página original.
¿Qué herramientas usar para solucionar problemas de redireccionamiento? John y Martin sugieren utilizar varias herramientas para diagnosticar y solucionar los problemas comunes del redireccionamiento. Entre ellas, destacan Google Search Console , que proporciona informes detallados sobre los cambios de dirección y errores de rastreo. Igualmente, Screaming Frog , una herramienta de análisis de sitios web, que puede identificar este tipo de problemas y otros errores técnicos.
También recomiendan utilizar herramientas de comprobación de encabezados HTTP, como curl. Con estas podrás verificar que las redirecciones estén configuradas correctamente y retornen el código de estado adecuado. Adicional a esto, aconsejan hacer pruebas manuales de tales desvíos de URL para comprobar su funcionamiento y detectar posibles errores.
Además de las herramientas mencionadas, el equipo entrega algunos consejos prácticos para diagnosticar y solucionar problemas de redireccionamiento:
Configuración de redireccionamiento. Asegúrate de que la configuración sea correcta y se implemente adecuadamente. Verifica que las URL antiguas se están redirigiendo correctamente a las nuevas URL. Dirección URL. Asegúrate de que las direcciones URL sean correctas y no haya errores tipográficos o de sintaxis en las URL. Una sola letra o carácter incorrecto puede evitar que una redirección funcione correctamente. Archivo robots.txt. Verifica que el archivo robots.txt no bloquee el acceso a las páginas que deseas redirigir. Si se bloquea el acceso a una página, la redirección no funcionará correctamente. Códigos de respuesta HTTP. Asegúrate de que estos sean correctos. Un código de respuesta incorrecto puede evitar que una redirección funcione correctamente. Pasos para realizar una redirección en tu web correctamente Las redirecciones son una herramienta importante para cualquier sitio web, ya sea para redirigir tráfico de una página a otra o para redirigir URL antiguas a nuevas. Sin embargo, es esencial implementarlas con exactitud para evitar problemas como pérdida de tráfico o afectar la experiencia del usuario.
Paso 1: Configurar el servidor. Accede al panel de control del servidor y busca la opción de o “redirect”. Paso 2: Elegir el tipo de redirección. Existen diferentes tipos, por lo que debes elegir el que mejor se adapte a tus necesidades. Los tipos más comunes son 301 y 302. Paso 3: Configurar la redirección. Una vez que hayas elegido el tipo, debes configurarla en tu servidor. Dependiendo del servidor que estés utilizando, la configuración exacta puede variar. En algunos casos, posiblemente, necesitarás editar un archivo de configuración específico o emplear una herramienta de gestión de servidores. Paso 4: Comprobar y solucionar errores. Asegúrate de que la redirección te lleve a la página correcta y de que no haya errores en el código o en la configuración misma del servidor. En conclusión, implementar redirecciones correctamente es crucial para mantener la salud y el rendimiento de un sitio web. Con estos pasos y los consejos entregados por el equipo de Google en mente, puedes implementarlas efectivamente. De esta manera, podrás garantizar que tu sitio web funcione sin problemas. También que siga siendo accesible para tus usuarios y los motores de búsqueda.